Introducción
Desde que el ingeniero informático Casey Rodarmor lanzara en enero de 2023 el protocolo Ordinals, se ha ido alimentando cada vez más la narrativa de los NFTs en la red de Bitcoin. Por primera vez, es posible mintear NFTs directamente en la red de Bitcoin sin utilizar una cadena paralela como ocurre con el proof of transaction de Stacks. En este artículo vamos a ver cómo funciona todo el proceso y qué repercusiones puede tener en el sector de los NFTs.
¿Qué son los Ordinals?
Para empezar, sabemos que cada Bitcoin se divide en 100 millones de unidades llamadas satoshis,. Este es un dato fundamental en el protocolo Ordinals, ya que permite a las personas que se descargan un nodo de bitcoin inscribir cada Satoshi con datos que pueden incluir contratos inteligentes.
Al fin y al cabo, Bitcoin no es una máquina Turing completa como Ethereum y solo acepta respuestas simples de carácter afirmativo o negativo para determinar el estado de las transacciones monetarias. Sin embargo, desde hace años se han ido implementando actualizaciones para programar aspectos relacionados con la modalidad de pagos o el tiempo de validación (Time Lock). Respecto a eso, Ordinals pretende ir incluso más allá al ofrecer un minteo directo en la blockchain.
¿Cuál es la diferencia entre los Ordinals y los NFTs tradicionales?
En primer lugar, los NFTs que se mintean en la red de Ethereum, Solana o Cardano suelen tener los metadatos fuera de la blockchain en un servidor IPFS, que funciona como un sistema descentralizado de almacenamiento externo. Esos datos pueden ser modificados, por eso algunas plataformas como Opensea nos ofrecen la posibilidad de refrescar los metadatos con el fin de mejorar la calidad de la imagen. Además, los creadores de la colección se llevan unos royalties cada vez que los NFTs se venden en el mercado secundario. Por el contrario, los Ordinals tienen todos los datos inscritos en la blockchain y no pueden ser modificados. Por eso, su creador los denomina artefactos digitales.
¿Cómo se configura la billetera Sparrow?
Comprar NFTs en la red de Bitcoin no es fácil, pues todavía no hay una plataforma como Opensea para el mercado de segunda mano. Eso significa que el acceso es mucho más difícil y que no está al alcance de todo el mundo. Así pues, para recibir los NFTs hay que configurar la billetera Sparrow, una aplicación de escritorio compatible con Ordinals. Una vez descagada la aplicación en nuestro ordenador, tenemos básicamente tres opciones:
- Ejecutar un nodo e inscribir un Ordinal, como si estuviéramos creando nosotros mismos un NFT.
- Utilizar un servicio de un intermediario que escriba el Ordinal por nosotros para que no tengamos que ejecutar el nodo.
- Encontrar algún propietario de Ordinal en Discord y comprárselo directamente de forma P2P.
El tercer caso es sin duda el más sencillo, aunque supone un riesgo muy alto de ser estafado. No hay ningún intermediario ni smart contracts de por medio y tendrás que confiar en que el usuario de Discord te va a enviar su NFT tras haber recibido el pago.
Además, recuerda que esta wallet no es para recibir ni enviar bitcoin, y solo sirve para recibir o enviar los Ordinals.
Conclusiones
Comprar NFTs en la red de Bitcoin no es fácil y se necesitan conocimientos avanzados para adentrarse en ese ecosistema. En caso de querer moverse por el mercado secundario, tenemos que tener en cuenta que no existe aún ninguna plataforma al estilo de Opensea o Magiceden (seguramente saldrá alguna a lo largo de 2023), por lo que hay que moverse con mucha cautela para evitar ser estafado.
Es probable que tengas que enviar dinero antes de recibir un Ordinal y que tengas que conectar con desconocidos en Discord. Así pues, se recomienda mucha prudencia y sobre todo no dejarse llevar por el FOMO.
Los NFTs en Bitcoin puede representar una interesante oportunidad de inversión por encontrarse en una época muy temprana, al igual que lo fueron los primeros NFTs acuñados en la red de Ethereum. Solo el tiempo dirá si el cacharreo y los riesgos que hay que asumir ahora pagarás sus dividendos el día de mañana.